Hoy tenemos la oportunidad de analizar de primera mano uno de los terminales de Nokia que más se verán en los próximos meses por las calles, el Nokia N78.
El Nokia N78 es un terminal que ha salido al mercado hace apenas 2 meses, pero que poco a poco se va a ir haciendo un hueco entre los operadores. Es una evolución del super éxito en ventas Nokia N73, mejorando notablemente la estética y la maquinaria de éste.
Estéticamente hablando, el Nokia N78 presenta un diseño bastante más cuidado que el N73. Es muchísimo más fino, algo que se agradece bastante, además pesa mucho menos, y las formas son mucho más estilizadas. El color frontal negro piano, aunque un poco guarrete ya que se quedan las manchas de los dedos sobre el, hace que dé más presencia de serio. En cuanto al teclado, no se compone de teclas separadas, sino que sobre el frontal se prolongan unas tiras bajo las cuales se iluminan los números en la pantalla, que a simple vista pueden parecer bastante difíciles de manejar, pero que tras unos minutos de manejo te acostumbras fácilmente. El único punto negativo en éste aspecto es que los botones de colgar, descolgar y distintos menús son prolongaciones del propio frontal, y son de difícil manejo, ya que se confunden fácilmente unas teclas con otras.
El Nokia N78 presenta numerosas mejoras en rendimiento con respecto a su predecesor. Incorpora el sistema operativo Symbian S60 v3.2, una versión bastante pulida y rápida de Symbian, que aunque no aporte grandes novedades, destaca por los pequeños detallitos como la velocidad de navegación por los menús. Además incorpora nuevos menús con iconos en 3D, animaciones entre un menú y otro, y la posibilidad de ver en el propio menú qué aplicaciones tenemos en uso en cada momento, algo bastante de agradecer, ya que a veces el gestor de aplicaciones se hacía insuficiente.
Podemos decir que éste terminal está orientado al uso multimedia, debido a su facilidad de uso en cuanto a reproducción de música y vídeos, y todo gracias al chip dedicado a la reproducción de sonido. El reproductor de Mp3, la radio FM incorporada y la galería de fotos están completamente accesibles desde el menú principal. Además Nokia ha visto a bien, además del stick de desplazamiento para los menús, la incorporación de la tecla Navi, que no es más que una especie de ruleta táctil que se encuentra en el centro del stick, que con tan solo pasar el dedo podemos desplazarnos como si de un iPod se tratara. Quizá lo mejor de todo es la incorporación de una clavija jack de 3′5mm para incorporarle cualquier casco que queramos, y no solo los oficiales de Nokia.
En cuanto a su cámara de fotos, quizá es un aspecto menos cuidado, ya que han incorporado la misma cámara que en el N73, que aunque no sea nada mala, siendo una evolución podían haberlo cuidado un poco más. Es una lente Karl Zeiss de 3′2mpx, con flash led incorporado, zoom y capacidad de hacer fotos macro. Además, la capacidad de grabar vídeo a 640×480 px es bastante envidiable en el resto de teléfonos.
Pero sin duda lo mejor de éste terminal es la incorporación de Wifi y GPS. Por un lado, la conectividad Wifi, muy de agradecer, ya que convierte nuestro teléfono móvil en una auténtica agenda para poder navegar por internet y revisar nuestro correo electrónico allá donde queramos. Y por otro lado la incorporación de GPS integrado, que junto a Nokia Maps y alguna de las aplicaciones que le instalemos, harán las delicias de todos, ya que no tendremos que llevar un aparatejo aparte para situarnos sobre un mapa.
En conclusión, un muy buen terminal, con todo lo que necesitas para no llevar tantos trastos encima, pero en cuanto a precio quizá sea algo elevado, ya que los 429€ que cuesta hacen que te pienses en mirar otros terminales, como por ejemplo el N82 y es mucho mejor terminal.
Via: nosolohardware
